ENTONCES QUE HACER?

 ¡Vas a tener un bebé! 
Las siguientes técnicas les permitirán a ambos padres cultivar un sentimiento de calma que afectará positivamente al hijo por nacer, preparándolo para una vida de confianza y seguridad. Al darle masajes al bebé, cantarle y danzar con él, los padres estarán estimulando su sistema nervioso y comunicándole su amor. Y al hablar y soñar con el niño que esperan, y visualizarlo incluso, estarán fortaleciendo un vínculo que es para toda la vida y haciendo del embarazo una época de un júbilo y un crecimiento indecibles.
Las propias madres han sabido describir, desde hace tiempo, las capacidades del niño aún no nacido y la posibilidad que tienen los padres de fortalecer el vínculo prenatal.

El programa para los nueve meses
Basado en nuestro sistema de armonización intrauterina, en el que cabe un importante papel a un conjunto de ejercicios demostradamente eficaces para relajar a los futuros padres y nutrir y estimular al niño hasta el momento del parto, durante el transcurso de éste e inmediatamente después.

Aquí tienes las ventajas de realizarlo:
  •          Cuando los padres comiencen a aplicar este sistema, se relajarán, eliminando o reduciendo la producción de hormonas de estrés, tales como la adrenalina y la noradrenalina, que en el caso de la madre pueden atravesar la barrera placentaria y afectar así al niño.
  •         A medida que el embarazo (y el programa de armonización intrauterina) avancen, también estimularán a su bebé, comunicándole su presencia a través de sus capacidades sensoriales, todavía no del todo afinadas.
  •        Los ejercicios que se ofrecen les ayudarán también a iniciar una forma de comunicación psicológica, haciendo que el niño sepa ya antes de nacer que realmente sus madres lo aceptan y lo quieren.
  •       El sistema de armonización intrauterina también puede ayudar a combatir los pensamientos negativos, las ansiedades y los miedos.
         La noticia te provoca una oleada de emoción... una sensación de maravilla quizás, o de pura y jubilosa alegría. Pero es probable que con estos sentimientos se mezclen otros: la duda, la inseguridad y el miedo. En la mayoría de las mujeres, el embarazo moviliza emociones diversas, y cuanto antes te pongas en contacto con todos tus sentimientos, más tranquilo será tu embarazo. Tal como seguramente ya sabes, no hay nada que dé a la vida de un niño cimientos tan sólidos como la experiencia de sentirse, ya desde el útero, amado y deseado. Idealmente, todos los hijos deberían ser concebidos con ternura y gestados con adoración, pero no sucede siempre así.  De todos modos, aunque el embarazo te haya tomado por sorpresa y amenace con complicarte la vida, no olvides que tu futuro hijo tiene tanta necesidad de tu amor como tú la tienes de aire para respirar y de comida para alimentarte. Como el niño no nacido necesita del afecto y la atención de ambos padres, tú y tu compañero deben destacar, siempre que les sea posible, los sentimientos positivos.